El Palpitar Noticias, Medellín, Antioquia, Colombia, Acontecimientos de interés común, Hechos de ámbito internacional.
El cuerpo de bomberos del municipio recibió ayudas por 80 millones de pesos.
Después de vivida la tragedia en el municipio de Salgar que dejó 88 muertos, un número indeterminado de desaparecidos y cientos de damnificados, las autoridades locales y nacionales dieron comienzo a los planes que se ejecutarán para atender a las víctimas y evitar nuevos desastres.
La Dirección Nacional de Bomberos, entregó al cuerpo de bomberos de Salgar 80 millones de pesos en dotación, además, la junta departamental de ese organismo aportará una camioneta con equipo de intervención rápida para la atención de emergencias.
Aunque ya se anunciaron los subsidios de vivienda de 250 mil pesos por tres meses, durante los próximos días se consolidará el plan de vivienda para los afectados, estrategia que estará liderada por el Ministerio de Vivienda nacional.
Al cierre de la jornada el pasado jueves 21 de mayo, se habían recuperado 88 cuerpos de las víctimas mortales por la avalancha, 61 ya fueron identificados y otros 27 deberán someterse pruebas de ADN. El pasado jueves se dio sepultura a 33 personas y 55 más permanecen en las instalaciones de Medicina Legal en Medellín.
Con respecto a los daminificados, la cifra inicial que hablaba de 352 ascendió a 1.455, de los cuales 533 son hombres, 445 mujeres y 477 menores, sin embargo, se estima que esta cifra corresponde al 90 % de los afectados, por lo que podría variar con el paso de los días.
Hasta este viernes 22 de mayo, se mantendrá el esquema de búsqueda con 200 socorristas y se iniciará el proceso de desmonte para quedar con 70 efectivos en sus labores de búsqueda, aseo y limpieza de las zonas afectadas y que aún se encuentran con lodo, escombro y basura en sus inmediaciones.
Como medida preventiva, Corantioquia indicó que se hace necesaria una evaluación en los municipios de Jardín, Hispania, Betania, Concordia, Andes, Ciudad Bolívar, Salgar, Betulia y Urrao, para determianr el riesgo en el que están las comunidades que habitan cerca a los afluentes y que pueden resultar afectadas en caso de fuertes lluvias y crecientes.
