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Pese a sufrir una dolorosa derrota en el estadio Atanasio Girardot y ante su hinchada, el Poderoso no bajó los brazos y superó al Cortuluá en los penales.
Con penales de infarto y un un héroe vestido de arquero, el Deportivo Independiente Medellín se clasifica a la final de la Liga Águila tras dejar eliminado al Cortuluá en la tanda desde los doce pasos. Una noche que será recordada en la historia por el suspenso y entrega de ambos equipos.
Desde el pitazo inicial se preveía como iba a ser este encuentro, pues bien, si fue verdad y el encuentro se convirtió en un vaya y venga, con varias opciones claras de anotar el primer encuentro de la tarde.
Tanto como Borja por el lado del Cortuluá como Castro en el DIM estuvieron a punto de vulnerar los arcos custodiados por los cancerberos rivales. Sin embargo, unos por suerte y otros por concentración, no se lograban concretar.
Aunque el DIM lucía concentrado, el equipo visitante lo hizo sufrir de más ante el juego colectivo y exquisito que demostraban en la zona defensiva, hasta que por medio de un tiro libre, Miguel Borja decretó el primer tanto, tras chutar el balón de forma rastrera y dirigirlo a las redes al minuto 40.
Durante el segundo tiempo se vio el frenesí de ambas escuadras por decretar así un encuentro a favor de cada uno, pero el DIM sobresalió y con la ayuda de sus volantes, crearon muchas opciones de anotar en el encuentro.
Para júbilo rojo, Luis Carlos Arias anotó el empate momentáneo al minuto 53, desatando la alegría de los hinchas del Poderoso, quienes esperaron el anhelado tanto para la remontada en el partido.
Posteriormente, la defensa vallecaucana cometió penal en el área tras bajar a Leonardo Castro. Sin embargo, Hechalar no tuvo la fortuna y el remate pegó en el palo.
Penales, la ansiedad cobró factura en ambas escuadras
Posteriormente, el Cortuluá limitó sus aspiraciones con el gol de Cardona para el conjunto visitante en el minuto 71 del encuentro, decretando así la victoria de los vallecaucanos en el partido de vuelta, dejando abierta la serie en los penales.
Durante la serie de penales, el DIM “estaba en el cielo y en el infierno” después de que dos jugadores del Cortuluá erraran las claras chances de avanzar a la final. Sin embargo, David González se vistió de héroe y ayudó a sus compañeros en la lotería.
En el penalti 15, Hernán Pertuz anotó el último gol Poderoso, dejando así el destino en manos del cancerbero local, quien logró tapar el tiro del jugador visitante y desatar la locura y desenfreno de los integrantes e hinchada en el “Coloso de la 74”.
Con este resultado, el DIM tiene el camino libre para disputar la final de la Liga Águila contra el Junior de Barranquilla, un juego que augura buenas emociones y conocer al primer campeón colombiano del 2016.
