El presidente Santos autorizó envío de avión a Caracas por Felipe González

González abandonó Caracas rumbo a Bogotá después de que las autoridades venezolanas no le concedieran los permisos para visitar a los líderes opositores encarcelados

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El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, autorizó el traslado de Caracas a Bogotá del expresidente del Gobierno español, Felipe González, en un avión de la Fuerza Aérea y luego se reunió con él para hablar del proceso de paz, informó su despacho este miércoles 10 de junio.

«Hoy al mediodía, el presidente de la República autorizó el traslado a Bogotá del ex presidente español, Felipe González,  desde el aeropuerto de Maiquetía en Caracas en el avión Legacy de la FAC 1215», señaló la Casa de Nariño en un comunicado.

González abandonó Caracas rumbo a Bogotá después de que las autoridades venezolanas no le concedieran los permisos para visitar a los líderes opositores encarcelados ni asistir a las vistas de sus juicios, según informaron fuentes diplomáticas en la capital venezolana.

La llegada de González a Bogotá estuvo rodeada del más absoluto secreto hasta que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, así como diputados chavistas y medios oficialistas venezolanos revelaron que viajó en un avión de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC).

Según el comunicado difundido por el Gobierno colombiano, «el presidente Santos se reunió en el Palacio de Nariño con el expresidente González en compañía del jefe negociador del proceso de paz Humberto De la Calle».

La información agrega que el tema central de la conversación fue el proceso de paz que el Gobierno de Colombia lleva a cabo en La Habana con la guerrilla de las Farc, así como la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Unión Europea (Celac-UE), que se inició hoy miércoles en Bruselas, para la cual Santos viajó a la capital belga.

Con EFE.

Acerca de Andrés Felipe Bustamante Restrepo

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Comunicador social - educador. Dios, familia, amigos. Interesado en el proceso de paz, en los deportes y en vivir en armonía. Poco comunicador, muy periodista. Me gusta saber sobre la historia de la Colombia violenta, no por apología, más por entender el porqué de todo este complot violento en el que vivimos inmersos los colombianos del común. Creo en lo que se hace bien, como diría un maestro: “no se mate haciendo las cosas, hágalas bien”. No hay que morir en el intento, hay que hacerlo.

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