El Rancherito, 40 años de tradición gastronómica

El Rancherito está cumpliedo 40 años y para celebrarlos están estrenando sede en Viva Las Palmas. Además, ya cuentan con entregas a domicilio.

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Foto: CORTESÍA.
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Sabores tradicionales que en pleno siglo XXI se siguen cocinando en los típicos fogones ancestrales, han sido la clave principal de lo que, en un inicio fue un ranchito con venta de empanadas, pasteles, chorizos y arepas y que hoy en día es una de las muestras gastronómicas más significativas del pueblo antioqueño: El Rancherito.

La historia de doña Mary Noreña y don Gregorio Alzate es la muestra fiel de cómo una adversidad se puede convertir en una oportunidad. Esta pareja de esposos es la típica familia antioqueña, trabajadora y fiel a las bondades que ofrece el campo, por eso cuando a don Gregorio lo despidieron de su empleo, confundido injustamente con un ladrón, el emprendimiento, que en ese entonces era simplemente una idea de negocio, fue la manera de sobrevivir.

Al lado de la carretera y con la ingeniosa e improvisada creatividad del paisa, esta pareja de esposos se fue abriendo paso entre las diferentes delicias gastronómicas que ofrece la cultura antioqueña y poco a poco fueron creciendo, hasta ampliar su primer sede y trabajar hombro a hombro con sus tres hijos, de los cuales dos son mujeres que apodaron “Las Monas” y que hicieron que El Rancherito cada vez tomara más fama, como lo contó Nora Alzate, una de ellas.

Nora Alzate recuerda con mucha nostalgia,con la voz se entrecortada y los ojos brillantes, esos inicios en los que sus manos quedaban maltratadas después de desgranar costalados de maíz para las arepas, pero también recuerda la sensación de felicidad que le quedaba con el deber cumplido.

Rancherito

“Para mi la clave en un inicio fue ponerle mucho amor a la preparación de la comida y mantener todo muy aseado, así se fue construyendo todo, con lo que me enseñó mi mamá y con la ayuda de Dios y la virgen (…)”, mencionó doña Mary, una mujer que aún se conserva vigorosa y que siempre está acompañada de su esposo, quien asentaba su cabeza como quien quiere reafirmar lo que el otro dice y sólo se animó a pronunciar algunas palabras para comentar que su plato preferido del restaurante son los fríjoles.

Y así han pasado cuatro décadas de sazón de El Rancherito, un restaurante con 10 sedes, en las que usted puede ir a deleitarse desayunando un calentao de la casa con fríjoles, arroz, huevo revuelto, tajada de maduro, arepa tela y chicharrón; almorzando una cazuela de fríjol con trozos de chicharrón, carne desmechada, maduritos, maíz tierno, aguacate, viruta de papa y arepa; o si lo que quiere es comerse algo más liviano puede probar la morcilla montañera. 

La carta sigue con una interminable lista de delicias, pues ya se han ampliado a otros sabores típicos de colombia, además de ofrecer postres, bebidas y hasta opciones vegetarianas. Así sigue creciendo esta muestra fuerte de emprendimiento que queda como un legado en las nuevas generaciones de los Alzate Noreña.

Acerca de Wendy Restrepo Guzmán

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Siempre estoy pensando en ideas descabelladas y lo mejor es que siempre encuentro un cómplice que me ayuda a realizarlas. Me apasiona descubrir que internet es un mundo aparte, lleno de novedades... Soy 100% música, amo el teatro y valoro a todo aquel que se anima a hacer arte. Me agrada casi todo el mundo, menos esos que se creen críticos y sólo son criticones, ¡esos no!

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