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Esta práctica se ha discutido en diversos países del mundo y en muchos se ha prohibido o legislado.
María del Rosario Guerra y Santiago Valencia, congresistas del Centro Democrático, radicaron un proyecto de ley que prohibiría el alquiler de vientres en Colombia. Esta práctica consiste en contratar a una mujer para que geste y dé a luz a un bebé, que luego sería entregado a una pareja en forma de adopción, que se compromete a criarlo sin la presencia de la progenitora. El costo de esta práctica en Colombia, asciende entre los 50 y los 60 millones de pesos.
En diálogo con EL PALPITAR, el representante a la Cámara, Santiago Valencia, afirmó que: “Vimos que la prohibición de este tema es una tendencia mundial, que en diversos países se desaprobó su práctica y en otros se le dio una reglamentación”, además aseguró que “se pensó porque el alquiler de vientres atenta contra los derechos de la mujer y de los niños, ya que los mercantiliza”.
El proyecto de ley está basado en un estudio técnico, jurídico, social y ético de la problemática, que busca reglamentar una práctica que según los congresistas “trae muchas consecuencias negativas” En países como Alemania, ésta práctica se ha prohibido.
Santiago Valencia también confirmó que “en el mundo han pasado diversas situaciones como que el niño nace con malformaciones y los padres biológicos después no quieren recibirlo, o que la madre gestante se niega a entregar al bebé” con esto, el congresista afirmó: “Las mujeres que acceden a alquilar sus vientres están en una situación vulnerable en la parte económica y social, son madres de familia y por lo general ya tienen hijos (…) cuando pasan estas situaciones, esta población se encuentra más vulnerable”.
Actualmente se encuentran páginas en Internet que brindan una oferta a las mujeres para que ofrezcan sus vientres ante esta práctica, pero se está buscando que el alquiler de vientres se prohíba o se legisle para evitar algunas consecuencias futuras.
“Lo importante es proteger los derechos de las mujeres y los niños”, afirmó el congresista Valencia y aseguró que “se vio la necesidad de discutir este tema en el Congreso, porque no hay leyes que regulen esto en Colombia y este es un país con cada vez más casos, por el bajo costo que ven los padres biológicos”.
Por otro lado, desde la Corporación Vamos Mujer de la ciudad de Medellín, la economista de la organización, Liliana Moreno, expresó que “las decisiones sobre el cuerpo de la mujer deben de ser de cada uno, es una decisión individual. Los derechos de las mujeres deben de garantizar siempre la autonomía”.
