El Palpitar Noticias, Medellín, Antioquia, Colombia, Acontecimientos de interés común, Hechos de ámbito internacional.
En el momento, la vía ya fue habilitada gracias al apoyo del Ejército, quien se encuentra en la zona colaborando para retirar de la vía los restos de los vehículos afectados.
De acuerdo con información de las autoridades de Mutatá, el hecho se presentó en el kilómetro 76, sector Taparales, de la vía que comunica a los municipios de Dabeiba y Mutatá, Urabá antioqueño. Allí cuatro carros: dos busetas, un camión y una cama baja, fueron quemados por combatientes del frente 34 de las Farc.
Según la secretaria de Gobierno de Mutatá, Lizeth Sibaja, «el primer bus fue incinerado a las nueve de la mañana: los guerrilleros abordaron el bus, hicieron bajar a los pasajeros y le prendieron fuego; luego, se presentaron enfrentamientos hasta pasadas las once de la mañana».
Las autoridades departamentales, igualmente, se pronunciaron sobre este hecho de seguridad que rompe la tranquilidad en el Departamento: «Nosotros hemos hecho esfuerzos grandes, recordemos que esta es una zona que ha tenido avances muy importantes en temas de seguridad; esto, desafortunadamente, hace parte del rompimiento de la tregua unilateral. Pero, con el general Pinto, el general Mendoza y con el Gobernador, se acordó hacer un esfuerzo mayor en las vías principales y en las zonas de infraestructura estratégica del Departamento». afirmó Santiago Londoño, secretario de Gobierno de Antioquia.
En el momento, la vía ya fue habilitada gracias al apoyo del Ejército, quien se encuentra en la zona colaborando para retirar de la vía los restos de los vehículos afectados. En el ataque no se presentaron personas lesionadas.
Por su parte, un bus de la empresa Cootransuroccidente fue atacado a disparos mientras que realizaba su recorrido en la vía.
Al respecto, el secretario de Gobierno de Antioquia, Santiago Londoño, dijo: «el bus, que evitó el retén, fue atacado con disparos; producto de eso hubo dos personas levemente heridas por esquirlas, porque afortunadamente no fueron disparos directos. Este ataque es reprochable y condenable, y constituye un delito de guerra».
