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El caso del pequeño Miguel Ángel, un bebé de 3 años que falleció aparentemente por maltrato infantil, ha causado conmoción e indignación entre la comunidad.
Después de la asonada que se presentó en el barrio Cristo Rey en la tarde de este viernes, 15 de septiembre, por el caso del bebé de 3 años que falleció en un aparente acto de maltrato infantil, las Autoridades custodiaron la salida de la madre y el padrastro de la vivienda. Sin embargo, fue hasta pasadas las 11:00 p.m. que se emitió la captura de estos dos como presuntos responsables del hecho.
“La Fiscalía General de la Nación expidió las órdenes de captura de la madre del menor y del padrastro, por los delitos de violencia intrafamiliar agravada y homicidio agravado. En estos momentos ellos se encuentran en la audiencia de legalización de la captura y medida de aseguramiento que determine el juez que se encuentre en este momento de turno”, afirmó el coronel Juan Carlos Restrepo, comandante operativo de la Policía Metropolitana, en la mañana de este sábado.
Además, las Autoridades dieron a conocer otros detalles del caso, pues según las primeras investigaciones el niño Miguel Ángel Rivera Giraldo presentaba múltiples hematomas y una lividez de 6 a 7 horas aproximadamente al momento de realizar la atención médica.
Después de que ocurrieron los hechos, vecinos del sector en donde residía la pareja aseguraron que éstos sometían al menor a violencia física y verbal constante.
“El bebé tenía una cantidad de golpes horribles, uno en la cabeza, otro en el cuello, en la clavícula, tenía los coditos mordidos, la cabeza estaba como si lo hubieran chuzado con un tenedor“, denunció una familiar del bebé, quien también comentó que en conversaciones con los vecinos del sector le manifestaron gritos en la noche anterior al hecho.
