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El Summer Academy se viene realizando desde hace seis años para afianzar conocimientos de estudiantes de todas partes del mundo.
Desde el pasado 13 de junio y hasta el próximo 30 de julio, la Universidad de La Salle en Bogotá abrió sus puertas a estudiantes procedentes de universidades de Filipinas, Estados Unidos, Bolivia, Brasil, México, Chile, quienes visitarán el país para el Summer Academy 2016.
El Summer Academy es un intercambio de vacaciones de verano, el cual consiste en brindar a los estudiantes de otros países cursos gratuitos en derechos humanos y resolución de conflictos, diversidad cultural, introducción al liderazgo para la justicia social, investigaciones feministas, descolonización, indigeneidad y género, justicia social, gerencia intercultural, desarrollo sostenible territorial y el cambio climático, los cuales fueron descritos por voceros de la institución universitaria como “los grandes desafíos globales que enfrenta el siglo XXI”.
Además de esto, la Universidad de La Salle dictará cursos enfocados en la transformación social como: los estudiantes con discapacidad y su acceso a la educación, una oportunidad de desarrollo individual y familiar, emprendimiento social y la solidaridad: puntos de vista de Francia – Palestina y el bien común y seguridad alimentaria mundial.
Voceros de la Universidad de La Salle, en un comunicado afirmaron que con esta iniciativa se espera que los estudiantes «puedan afianzar sus conocimientos sobre diversas disciplinas que posteriormente podrán aplicar en el ejercicio de sus profesiones«.
Este es el sexto año en que la Universidad de La Salle trabaja en la iniciativa de traer a las aulas de clase en Bogotá, docentes y estudiantes internacionales. Lo cual, según la institución: “Permite el afianzamiento de herramientas para los estudiantes en su ejercicio profesional con educación de alta calidad”.
Cabe resaltar que se ofrecieron becas para los estudiantes provenientes de otras partes del mundo. Estas incluyen 10 días de clases, excursiones culturales, certificado de finalización y recogida y vuelta al aeropuerto. Sin embargo, los estudiantes se comprometieron a asumir los costos de alojamiento y comida, aunque La Salle los ayudó a encontrar hospedaje en casas de familia o dormitorios.
