Fue sentenciado el hombre que mató a su mamá y guardó el cadáver en una nevera

El sentenciado será recluido en un centro siquiátrico de La Ceja, Antioquia, bajo vigilancia médica permanente.
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Foto: ARCHIVO.
Gildardo Antonio Aristizábal Betancur, de 23 años de edad, procesado por el homicidio de su madre Omaira del Socorro Betancur Monsalve, fue sentenciado a cumplir una medida de seguridad consistente en internamiento en un centro siquiático, por un período de tiempo no superior a diez años.

Así lo estableció este miércoles 24 de junio el Juzgado Tercero Penal del Circuito del Municipio de Bello, Antioquia, luego de valorar las pruebas que presentó la Fiscalía, donde se estableció que al momento de perpetrar el crimen, Aristizábal Betancur «presentaba un transtorno mental transitorio», como quedó consignado en el informe presentado por los peritos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.

El fallo establece, igualmente, que el sentenciado será recluido en un centro siquiátrico de La Ceja, Antioquia, bajo vigilancia médica permanente y donde le serán suministrados los medicamentos necesarios para su recuperación.

Los hechos que llevaron a la sentencia de Aristizábal Betancur, se llevaron a cabo el 24 de noviembre de 2013, cuando investigadores de la Sijin de la Policía Metropolitana realizaron la inspección técnica al cadáver de la víctima de 65 años de edad, el cual estaba oculto en la nevera de una vivienda ubicada en el barrio Prado de esta población en el Norte del Valle del Aburrá.

Un día después del hallazgo, el hijo de la víctima, quien prestaba el servicio militar en un batallón del Ejército del municipio de Rionegro, se presentó ante la Fiscalía y confesó el crimen, pero por su estado de alteración  fue remitido después de la diligencia al Hospital Mental de Antioquia.  

El 8 de enero de 2014, el joven fue capturado por la Policía y no se allanó a los cargos que le imputó la Fiscalía por el delito de homicidio agravado.

Acerca de Andrés Felipe Bustamante Restrepo

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Comunicador social - educador. Dios, familia, amigos. Interesado en el proceso de paz, en los deportes y en vivir en armonía. Poco comunicador, muy periodista. Me gusta saber sobre la historia de la Colombia violenta, no por apología, más por entender el porqué de todo este complot violento en el que vivimos inmersos los colombianos del común. Creo en lo que se hace bien, como diría un maestro: “no se mate haciendo las cosas, hágalas bien”. No hay que morir en el intento, hay que hacerlo.

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