La Unidad de Emergencias Ambientales investigó tres empresas, las cuales no evidenciaron haber sido responsables de la coloración.
Durante esta semana, tras la coloración del Río Medellín al parecer por el derrame de líquidos al afluente, las autoridades ambientales -Corantioquia y Área Metropolitana- han realizado constantes visitas e indagan por los responsables del hecho, que afecta a toda la ciudadanía.
«Nosotros teníamos dos o tres coloraciones a la semana, y en los últimos meses no tuvimos. Esto obedecía a que las empresas que estaban haciendo eso, aprovechaban que las dos autoridades trabajábamos independientemente. Al estar haciendo las visitas diarias y de forma permanente, las empresas no pueden evadir», explicó Alejandro González, director de Corantioquia.
Justamente, dicha entidad explicó que durante los días 26 y 27 de julio se realizaron siete visitas repentinas a tres empresas sospechosas de haber podido ser los responsables, ubicadas en el sector de La Tablaza, en La Estrella.
Las compañías, adscritas al sector textil, no levantaron ningún tipo de sospecha durante las visitas. «Solo una mostró indicios, aunque en las visitas realizadas a esa empresa, se constató que la planta de tratamiento está trabajando en aparente normalidad», detalló en una comunicación Corantioquia.
A comparación de 2016, la cantidad de casos por coloraciones han disminuido: en dicha anualidad, se registraron por lo menos 30 reportes de coloración, que conllevaron a tres procesos sancionatorios, pues se encontró que 12 de dichos reportes obedecían a malas actividades industriales.
En cambio, durante el presente año solo se ha dado un caso de coloración en la jurisdicción de la entidad, a saber, aquellos municipios por fuera del área metropolitana.
«Estos resultados, además, son el reflejo de la articulación con el Área Metropolitana, a través de la Unidad de Emergencias Ambientales, por medio de la cual se realizan monitoreos diarios desde el nacimiento del río en el municipio de Caldas, finalizando en el Puente de Guayaquil, en Medellín, alertando sobre posibles afectaciones afluente», señaló la entidad.
Corantioquia explicó, además, que los operativos son cada vez más rigurosos y numerosos, pues ahora incluyen «registros al interior de las empresas en la jurisdicción de ambas autoridades ambientales, incluso en las madrugadas, con toma de muestras de aguas cuando es necesario y evitar así posible contaminación».
Por su parte, el Área Metropolitana se mantuvo en la misma línea de opinión e indicó que seguirán las visitas a las empresas sospechosas.
