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Muy ligado a lo que siempre difundió en campaña fue el mensaje de Donald Trump en su discurso de posesión como Presidente de Estados Unidos.
Puntual, siendo las 11:00 a.m., hora de la Costa Oeste de Estados Unidos, Donald Trump dio inicio a la ceremonia de transferencia de poder en la que se juramentó como el nuevo Presidente de Estados Unidos ante la vista de cientos personas que se acercaron hasta el Capitolio en Washington y los miles de ojos que con asombro siguieron la transmisión en vivo, pues lo que era casi imposible para muchos, hoy es una realidad.
Un hombre multimillonario que en su vida se ha dedicado a los negocios de casinos, realitys y reinados de belleza, es el líder hoy de uno de los países que son potencia mundial, al que quiere impactar fuertemente en cuestión de economía, como lo dejó saber en su discurso.
“Por muchas décadas hemos enriquecido la industria extranjera a costa de la nuestra, hemos subsidiado el ejercito de otros países mientras que permitimos al agotamiento de nuestra propia fuerza militar, hemos defendido otras naciones y sus fronteras mientras rechazamos defender las nuestras y hemos gastado millones de dólares en otros países, mientras la infraestructura nuestra ha caído en un lugar de no reparación”, aseguró Trump en su discurso.
El nuevo Presidente de Estados Unidos insiste en devolverle la riqueza a los americanos alegando una época en la que sólo “los políticos prosperaron”. Sin embargo, hay muchos ciudadanos que discrepan en eso, por lo que hoy se han presentado disturbios en los que algunos argumentos de los manifestantes son: “Solo velará por los ricos y pondrá en riesgo a los más vulnerables” o “es un payaso, no debería ser presidente, cambia la política del país a un reality show”.
En cuanto al tema de migración también fue muy enfático, recalcando que tomará decisiones que sólo favorezcan a los estadounidenses: “Nosotros acá reunidos estamos emitiendo un nuevo decreto que se va escuchar en cada capital del mundo, de este día en adelante será únicamente primero Estados Unidos. Vamos a proteger nuestras fronteras de los abusos de otros países que están robando nuestras compañías y destruyendo nuestros empleos”.
Posterior, lanzó la polémica frase: “Vamos a seguir dos reglas sencillas, compre americano y contrate americano”.
La ceremonia, en la que se entonaron coros, cantó una joven ganadora de un reality y se lanzaron salvas de cañón en su honor, estuvo muy marcada por lo religioso con el discurso de varios miembros de la iglesia y con las palabras de Trump, quien se encomendó a Dios.
Por su parte, Barack Obama, el primer presidente negro de Estados Unidos y uno de los más queridos por los americanos e inmigrantes, se despidió del cargo con las siguientes palabras: “Para mi es un honor, fue un honor en mi vida haberles servido. Ustedes me hicieron un mejor líder”.
Paralelo a la ceremonia, la más corta de su tipo en mucho tiempo, hubo manifestaciones de un movimiento que se hace llamar: “Mi Presidente no es Trump”, que dejaron un policía y una fotógrafa gravemente heridos, así como grandes daños a locales comerciales y cerca de 60 arrestados.
Y así empieza lo que se denomina como la era Trump, que pone al mundo a la expectativa de lo que pasará en los próximos 4 años, aunque el Presidente número 45 juró ante su país: “Nunca, nunca los decepcionaré”.
