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“La venta de Isagén es como la pérdida de Panamá”: aseguró Pablo Bustos, presidente de la Red de Veedurías.
La Fiscalía General inició una investigación preliminar en contra del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, por la premura venta de Isagén, una de las empresas más activas y que produce el 16% de la energía que consume el país.
Pablo Bustos, presidente de la Red de Veedurías, fue quien pidió a la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría, investigar esta venta al considerarla un acto de corrupción por parte del Ministro y creerla solo una forma para favorecer a la empresa canadiense compradora.
En diciembre del 2015, el Gobierno Nacional anunció la subasta de Isagén, la cual tuvo lugar el pasado 13 de enero. Para el Presidente de la Red de Veedurías, esto impidió participar dentro de esta venta. Isagén fue vendida por 6,49 billones de pesos a la empresa canadiense Brookfield Asset Management, lo que aún sigue siendo una decisión cuestionada por diferentes políticos y personas en el país.
La denuncia dice textualmente: “Así, en efecto, se determinó y direccionó el proceso contractual para impedir la concurrencia real y efectiva de una pluralidad de oferentes e interesados ciertos en dicho proceso, y de paso se coartó de manera deliberada la posibilidad de contar con una puja real por el precio final”.
Además, se conoció que Brookfield era casualmente la única empresa que cumplía con los requisitos establecidos por las autoridades para su adquisición y posee actualmente varias investigaciones por actos de corrupción en Brasil, al realizar proyectos por medio de sobornos.
Ante esto, Bustos considera que esto es una “actitud irresponsable”. El Ministro fue denunciado por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y concierto para delinquir.
