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Con el programa MANÁ, se mejoró el estado nutricional de más de 197 mil niños y niñas de Antioquia.
Durante el portafolio de experiencias nacionales y territoriales ‘Saber Hacer Colombia’, la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional -APC- destacó la labor del programa antioqueño MANÁ con miras al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-.
El programa, que dirige y supervisa la Gobernación de Antioquia, fue la única entidad destacada por el organismo, que por medio del programa de objetivos ‘Hambre Cero’, pretende erradicar el hambre y las muertes por desnutición.
El principal objetivo de MANÁ, según la Gobernación, es «garantizar el acceso a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades», a la vez que impulsa a llevar una vida sana y activa.
Por medio de suplementos nutricionales, la Gobernación coadyuva la alimentación de los menores de familias de escasos recursos, además de impulsar acciones e iniciativas para mejorar la disponibilidad, acceso, uso y aprovechamiento de los alimentos que poseen.
Entre los resultados más destacados, se resaltó una disminución del 76% en la desnutrición desde el año 2000 hasta el 2014. Igualmente, el descenso de la desnutrición crónica o retraso en el crecimiento pasó de 19,2% a 10,2% para el mismo periodo.
Según cifras suministradas por el Departamento, MANÁ ha permitido hasta la fecha que 197 mil niños mejoren su estado y salud nutricional, en tanto que ha «impactado positivamente el desempeño académico de 348 mil escolares de Antioquia».
Tal meta la consiguió a través de una estrategia por medio de la cual se sirven desayunos durante la jornada escolar, mientras se promueven estilos y hábitos de vida saludables.
Además, se recalcó que en el último lustro cerca de 826 menores y 428 madres lactantes y gestantes adscritas a las comunidades indígenas que habitan Murindó, Vigía del Fuerte y Frontino, que a su vez son grupos poblacionales dispersos en los que se complejiza una correcta alimentación.
Para la correcta ejecución de MANÁ ha sido vital «el empoderamiento de los actores locales», además de la «articulación con líderes de cooperativas, agremiaciones, grupos de padres de familia o asociaciones de mujeres, y en la distribución del complemento nutricional donde se involucran estructuras sociales locales existentes», concluyó la Gobernación.
