Además del relato de un copiloto, se conoció un audio de la Aerocivil que revela la crudeza del accidente, que deja hasta el momento 71 víctimas fatales.
Este miércoles se conoció un desgarrador audio que corroboró las declaraciones del copiloto de Avianca, Juan Sebastián Upegui, frente al siniestro del avión que transportaba al equipo brasileño Chapecoense rumbo a la ciudad de Medellín.
Upegui había declarado que durante el accidente había varias aeronaves procurando aterrizar en el aeropuerto José María Córdova, en Rionegro. «A nosotros nos mandaron a esperar a 21 mil pies, porque había un Viva Colombia con una emergencia. Luego bajamos a 19 mil pies, y mientras el Viva Colombia aterrizaba, el avión de Chapecoense daba vueltas por encima de nosotros», dijo Upegui.
Después de algunos momentos, el piloto del Lamia cambió el tono de voz y, más preocupado, solicitó ayuda a la controladora. «De repente, le dijo a la controladora que solicitaban prioridad para proceder a la pista, que tenían problemas de combustible. El comandante me dijo: ‘Tiene problemas de combustible y, ¿no se va a declarar en emergencia?’. Nunca se declaró en emergencia», señaló Upegui.
Entonces, así prosiguieron los acontecimientos: «La controladora dijo que no se podía proceder porque había un avión aterrizando de emergencia (el de Viva Colombia) (…) Empezaron (el avión siniestrado) a bajar a toda. La controladora nos envió a otro rumbo, y el avión nos pasó por el lado a toda mierda. Cuando iba bajando, se declaró en emergencia porque tenía fallas de combustible», indicó el Copiloto.
Con el pasar de los minutos y luego de que la pista ya estuviera disponible, la situación tomó tintes trágicos.
«La controladora le preguntó cuál era el problema, y el man (el piloto) le dijo: ‘Ahora tenemos falla total eléctrica’, y solicitó vectores para proceder a la pista. Entonces la controladora le dijo que no lo tenía en contacto radar. Y el man estaba desesperado», dijo el trabajador de Avianca, compañía que corroboró la información.
Segundos después, la controladora intentó retomar el contacto con el avión, pero fue imposible. Según Upegui, se escuchaba la voz quebrada de la operaria al ver que no había contacto y que incluso él y su piloto empezaron a llorar.
Ante las declaraciones y los audios conocidos, la Aerocivil precisó que es necesario que todos los testigos presenciales de los hechos, a saber, los pilotos y copilotos que se encontraban en la zona en ese momento, den declaraciones judiciales.
“Aspiramos a que el autor del audio pueda ser un testigo, porque siempre se ha dicho que dentro del espacio aéreo había varias aeronaves. Por lo tanto los pilotos son testigos presenciales, necesitamos el testimonio de esta persona para aportar en esta investigación”, explicó el director de la Aerocivil, Alfredo Bocanegra.
