Según la Policía, la red financiera pagaba entre 2 y 3 millones de pesos a quien lanzara una granada contra una estación de la Policía en el Bajo Cauca, o asesinara a un uniformado.
Once meses de investigación por parte del Gaula y la Policía permitió desmantelar una red criminal del Clan del Golfo en el Bajo Cauca antioqueño, zona donde delinquían y extorsionaban para seguir gestando asesinatos contra los uniformados mediante el plan pistola.
La Operación Orión de la Policía se desplegó en los municipios de Caucasia, Zaragoza, El Bagre y Nechí, donde se logró la captura de 12 de sus integrantes, además de la dada de baja de uno de ellos.
Según Inteligencia de las autoridades, esta red criminal denominada como Libertadores del Bajo Cauca, se dedicaba a la extorsión a gremios y comercialización de cocaína en sus zonas de presencia, que abarca el bajo Cauca, sur del departamento de córdoba y Sur de Bolívar.
Sin embargo, estas personas iban más allá porque en su haber se registran 15 homicidios, producto de disputas internas, control estructural, malos manejos del dinero y deserción.
«Es importante señalar que esta red pagaba, con el dinero fruto de las extorsiones, al brazo sicarial en el Bajo Cauca para sicariar contra los uniformados, en monto oscilaba entre dos y tres millones de pesos», declaró el Coronel Wilson Pardo, comandante de la Policía de Antioquia.
Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía 38 Especializada contra el Crimen Organizado de la ciudad de Medellín, por el delito de concierto para delinquir agravado con fines de Homicidio, Extorsión, Tráfico de Sustancias Estupefacientes y Desplazamiento Forzado.
