Además de confirmar la identidad de los fallecidos, la empresa contratista de las víctimas dejó entrever la posibilidad de un ataque criminal en incidente de la mina de Buriticá.
Luego de confirmarse la muerte de seis mineros debido a la explosión en una mina de Buriticá, en el Occidente antioqueño, autoridades investigan si el incidente se trató, en realidad, de una acción criminal (Lea: Explosión en mina en Buriticá deja seis fallecidos).
De acuerdo con un comunicado de la multinacional Continental Gold, contratista de las víctimas mortales, sus seis trabajadores fallecieron por asfixia, luego de ser abordados por extraños quienes, según la compañía, serían mineros que se dedican a su actividad de forma ilegal.
«Los contratistas se encontraban realizando una inspección subterránea de rutina en una mina ilegal cerrada por orden del Gobierno Nacional, dentro de las acciones de cumplimiento de cierre emanadas; cuando fueron abordados por parte de mineros ilegales seguido de una explosión», apuntó la empresa.
Y es que, de acuerdo con las declaraciones del único sobreviviente de la tragedia, los mineros fueron atacados con el fin de que murieran asfixiados al interior de la mina, y dichas acciones criminales terminaron originando la explosión que desencadenó en la tragedia.
Así pues, los hechos de la mina El Morocho son materia de investigación, pues podría obedecer a una retaliación de la minería ilegal contra las medidas que las autoridades gubernamentales han tomado en favor de Continental Gold y la minería legal y registrada.
Por tal motivo, la Fiscalía se ha asentado en la vereda Los Asientos, donde está ubicada la mina, con el fin de reunir material probatorio y otros elementos que permitan precisar lo ocurrido en la tragedia en la que fallecieron Fabián Ibarra, Efraín González, Ramiro Trejos, Elícer Vanegas, Luis Ramiro Guzmán y Luis Ernesto Jaramillo.
Continental, por su parte, solicitó «impulsar todos los medios legales existentes para que los responsables respondan ante la justicia», insinuando así las fuertes sospechas que se tienen de que el accidente, en realidad, se pudo tratar de un homicidio.