La Fundación Forjando Futuros denunció que el reclamante de tierras no tenía esquema de seguridad, pese a que había sido amenazado a mediados de 2016.
La violencia sigue enfrascada contra la restitución de terrenos despojados durante el conflicto armado. Esta mañana del domingo 29 de enero fue encontrado sin vida Porfirio Jaramillo Bogallo, un reclamante de tierras que fue secuestrado en la noche del sábado en el municipio de Turbo.
De acuerdo con la denuncia dada a conocer por la Fundación Forjando Futuros, Porfirio Díaz fue asesinado y abandonado en el sector conocido como El Tigre, en el municipio ubicado en la subregión del Urabá antioqueño.
“Porfirio Jaramillo, víctima reclamante de tierras en Urabá, fue secuestrado en la noche del sábado y hallado muerto horas después de su desaparición. Sus vecinos narraron que hombres armados en motos llegaron hasta la vivienda de Porfirio y se lo llevaron”, denunció Gerardo Vega, Director de la Fundación.
De igual manera, La Unidad de Restitución de Tierras (URT) lamentó y condenó el homicidio del señor Porfirio Jaramillo Bogallo.
“Rechazamos enfáticamente cualquier hecho de violencia contra víctimas del conflicto armado y, en especial, contra quienes participan del proceso de restitución de tierras. Solicitamos a las autoridades correspondientes que se investigue y judicialice a los responsables materiales e intelectuales de estos hechos”, declaró la directora de la URT Antioquia, Paola Cadavid Acevedo.
Actualmente, la víctima solicitaba la restitución de un predio ubicado en la vereda Buenos Aires, del corregimiento Nuevo Oriente. Sin embargo, desde mediados de 2016 estaba siendo objeto de amenazas contra su vida.
Ante esta situación, se solicitó a la Unidad Nacional de Protección un esquema de seguridad para proteger su integridad, pero ésta nunca llegó, pese a que la URT manifestó que su requerimiento estaba activado.
Finalmente, la Fundación Forjando Futuros solicitó al Gobierno Nacional que proteja a los reclamantes de tierras, especialmente a los señores Wilson David y Carlos Páez, víctimas que también han recibido amenazas.
