La Repostería Astor, que nació en 1930 con cinco mesas, diez empleados y un modesto equipo, continúa haciendo historia y se sigue consolidando entre propios y visitantes como una de las primeras opciones si de chocolatería, confitería y comida se trata.
Ubicada en una de las carreras más emblemáticas del Centro de Medellín: Junnín, de la mano de la Cámara de Medellín para Antioquia y en articulación con diferentes empresas del sector turístico, sus directivos afrontaron un año inigualable: el 2021.
Esta fue una de las empresas que participó y aprovechó los beneficios del programa Hagamos Historia: Proyecto de activación de las empresas del turismo ejecutado por el Cluster Turismo de Negocios en el que participaron 390 empresas y 456 empresarios fortaleciendo sus capacidades para la reactivación de las empresas de este sector.
Carlos Alberto Silva, gerente de Astor, lo resume como un año para hacer historia, ya que salieron adelante durante la pandemia y encontraron en la Cámara de Comercio de Medellín una mano amiga que los incentivó a crecer y a sacar adelante una tradición de 91 años.
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La Repostería Astor, que nació en 1930 con cinco mesas, diez empleados y un modesto equipo, continúa haciendo historia y se sigue consolidando entre propios y visitantes como una de las primeras opciones si de chocolatería, confitería y comida se trata. Ubicada en una de las carreras más emblemáticas del Centro de Medellín: Junnín, de la mano de la Cámara de Medellín para Antioquia y en articulación con diferentes empresas del sector turístico, sus directivos afrontaron un año inigualable: el 2021. Esta fue una de las empresas que participó y aprovechó los beneficios del programa Hagamos Historia: Proyecto de activación de las empresas del turismo ejecutado por el Cluster Turismo de Negocios en el que participaron 390 empresas y 456 empresarios fortaleciendo sus capacidades para la reactivación de las empresas de este sector.Carlos Alberto Silva, gerente de Astor, lo resume como un año para hacer historia, ya que salieron adelante durante la pandemia y encontraron en la Cámara de Comercio de Medellín una mano amiga que los incentivó a crecer y a sacar adelante una tradición de 91 años.
