Además del cuádruple homicidio de mineros, el Zar del Oro también es responsable de financiar a la criminalidad y realizar extorsiones en Remedios y Segovia.
A 55 años de prisión fue sentenciado Jairo Hugo Escobar Cataño, el Zar del Oro, por el homicidio de cuatro mineros en el municipio de Remedios y por financiar a grupos delincuenciales.
Investigaciones adelantadas por la Fiscalía General de la Nación lograron demostrar que el Zar del Oro había ordenado la muerte de los mineros Johan Esteban Pareja Avendaño, Jaime Nicolás Jiménez y los hermanos Yeison Andrés y Wilmar Alberto Taborda Jiménez, conocidos como Los serafines.
Los hechos ocurrieron el 20 de diciembre de 2011, cuando las víctimas fueron citadas a una supuesta reunión en la finca La Tía de la vereda La Roca, donde fueron asesinados por una estructura criminal.
Estos cuatro homicidios, los cuales fueron pactados en 800 millones de pesos, se deberían a causa de un atentado que sufrió Escobar Castaño, además de la negativa de las víctimas de vender un yacimiento aurífero del que eran copropietarios.
Asimismo, fiscales lograron establecer que el Zar del Oro aportaba grandes sumas de dinero a estructuras delincuenciales como Seguridad Héroes del Nordeste, y también extorsionaba a mineros de Segovia y Remedios.
Además de la sentencia por los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo y sucesivo y concierto para delinquir agravado, en calidad de financiador, el juez también ordenó investigar a varios de los testigos por el delito de falso testimonio.