Jóvenes de la ciudad cumplirán un papel vital en la nueva Política Pública de Seguridad y Convivencia presentada el día de ayer.
En una labor interinstitucional entre la Secretaría de Seguridad, la Secretaría de Juventud, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito y la Policía Metropolitana, se desarrolló la nueva Política Pública de Seguridad y Convivencia que tendrá el objetivo de plantear un modelo integral para la resolución de problemáticas de seguridad en la ciudad.
David Álamos, representante de la Oficina de Naciones Unidas, reconoció que Medellín ha innovado también en temáticas afines a seguridad. «Nosotros creemos que el hecho de tener una Política Pública, de la manera tan seria como se ha hecho, es muy avanzado y sitúa a la ciudad en una comprensión alta del fenómeno de seguridad y de una manera mucho más integral, como viene realizándose en otras ciudades del mundo», destacó.
Por su parte, Valeria Mejía, secretaria de Juventud de Medellín, explicó que «el reto tiene que ver con la construcción de confianza de los ciudadanos, y esa es la gran novedad de esta Política Pública de Seguridad y Convivencia». Valoró el hecho de que la iniciativa este centrada en la juventud, ya que la dinámica del homicidio en la ciudad radica en «jóvenes que asesinan jóvenes».
Sin embargo, a pesar de que sigue habiendo un número alto de homicidios en la ciudad, los indicadores por muertes violentas en la ciudad han disminuido con relación al año pasado. Mientras que para el 30 de septiembre de 2014 se habían registrado 529 asesinatos en la ciudad, hasta el lunes pasado iban 361 casos.
Esta tasa de homicidios es la menor de las últimas cuatro décadas: mientras en 1991 la tasa fue 395,5 muertes violentas por cada cien mil habitantes, el año pasado esa cifra fue de 27 por cada cien mil. Si a eso le añadimos que la disminución para esto 2015 representa una disminución del 33 por ciento con relación al año pasado, las cifras son alentadoras.
Según el vicealcalde de Gobernabilidad y Seguridad, Luis Fernando Suárez Vélez, «con la construcción de esta Política Pública de Seguridad y Convivencia se busca que los futuros alcaldes de Medellín tengan una hoja de ruta y que la agenda de seguridad se mantenga como prioridad» para por lo menos 10 años.
Esta Política, construida por expertos en seguridad de la Alcaldía y la academia, actores de la sociedad civil, los entes judiciales, los organismos de seguridad y los gobiernos nacional y local, tendrá siete lineamentos básicos, a saber:
- Jóvenes como víctimas y victimarios.
- Ciudadanía como responsable directa de la seguridad.
- Gestión del conocimiento e investigación técnica.
- Derechos Humanos.
- Violencia de género: feminicidios, violencia sexual, violencia intrafamiliar y maltrato infantil.
- Enfoque territorial.
- Construcción de la paz en la ciudad en un factible escenario de posconflicto.
