El Inder explicó los procedimientos a los que será sometido el gramado antes, durante y después del concierto de Gun N’ Roses, para luego seguir con la semifinal de la Copa Sudamericana.
El gramado del estadio Atanasio Girardot tendrá una prueba de fuego en tan sólo 24 horas por el concierto de los Guns N’ Roses este miércoles y la semifinal de la Copa Sudamericana el día jueves, situación que será auditada y mantenida por el Inder.
De acuerdo con información suministrada por la entidad deportiva de la capital antioqueña, más de 15 mil estibas estarán instaladas sobre el gramado, cumpliendo dos funciones explícitas para el concierto.
Por un lado servirá como piso artificial para todos los asistentes al concierto y, además, evitará que la gramilla sufra graves daños debido al peso al que estará expuesto, para así garantizar su seguridad y compactibilidad.
Luego de finalizado el concierto de la banda norteamericana, técnicos del Inder y tres grupos logísticos procederán a realizar sus labores para poder tener descubierta la grama, en seis horas.
“Está pactado que el concierto finalice a la medianoche e inmediatamente entran los técnicos a hacer el desmonte de todas las estibas, Luego un aseo general de la grama para que a las 6:00 de la mañana ya tengamos descubierta la gramilla”, puntualizó Juan Esteban Restrepo, director de escenarios del Inder.
Posterior a esto, se procederá a realizar las labores de cepillado, riego, aireación, oxigenación y corte, acciones que deberán estar finalizadas para las 4:00 de la tarde de este jueves.
Aunque las acciones a tomar supondría tener un gramado en excelentes condiciones, el Inder advirtió que los asistentes observarán un color amarillo en algunas zonas del gramado, situación que no pondría en problemas el partido entre Nacional y Cerro Porteño.
