Según cifras suministradas por el Observatorio Ambiental de Medellín, el 80% de la emisión de gases provienen del parque automotor, uno de los principales problemas que generan la contaminación.
Grupos ambientalistas y expertos coinciden que para superar la contingencia atmosférica que está atravesando el Valle del Aburrá se deben adoptar medidas a profundidad.
Desde hace varios días se viene evidenciando un problema de contaminación en el Valle del Aburrá, la misma que puso en jaque el medio ambiente y la calidad del aire a mediados de 2016.
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Paños de agua tibia para una situación trascendental
Para la corporación ambientalista del municipio de Itagüí, Cipas, las decisiones tomadas por el Área Metropolitana han sido superficiales y no se mira con profundidad el problema y se queda solo en el plano visual, es decir, en la polución que se observa cada mañana en las laderas del Valle del Aburrá.
“Si bien ya es una ganancia que reconozcan que hay una crisis en la calidad del aire, pero por un lado no se puede quedar en lo meramente estético, sino que ya se convierte en un problema de salud pública y mortalidad por la baja calidad de nuestro aire”, explicó Edwin Bermúdez, director de la corporación ambientalista Cipas.
Para el director de la Corporación, es importante observar el crecimiento urbanístico y la masiva construcción de vías en el territorio, situaciones que estimulan cada vez más la adquisición de vehículos particulares, elementos que incentivan la contaminación.
“Las medidas deben ser proyectadas y a futuro, ya que el crecimiento urbanístico, el estímulo de uso de vías y sus construcciones traen por consiguiente el uso de más vehículos, situaciones que nos van a llevar a una inviabilidad de calidad de aire pésimo en un futuro”, lamentó Bermúdez.
Estímulos para desescalar el transporte particular
Frente a los desafíos en temas de movilidad, desde el Observatorio Ambiental de Medellín se considera que en el corto plazo se debe enfatizar el uso del transporte público, debido a que el 80% de los gases de emisión provienen del parque automotor.
“Entre otras medidas, consideramos que a corto plazo deben promover la reducción del uso de trasporte particular, sean carros y/o motocicletas y fomentar el uso de transporte público de calidad. Además, continuar con el diseño y la construcción de más ciclorrutas seguras para el uso de la bicicleta”, señaló Jesús Emilio Gaviria, Coordinador del Observatorio Ambiental.
De igual manera, recomendó que “a largo plazo Medellín y el Área Metropolitana deben consolidar el transporte sostenible que usen energías alternativas tales como el como el Metro, Metro plus, cables y el Ferrocarril de Antioquia”.
Recomendaciones de la autoridad ambiental
El Área Metropolitana, entidad ambiental del Valle del Aburrá emitió una alerta naranja el pasado martes 28 de febrero ante el incremento del material particulado contaminante 2.5, de acuerdo con el paquete de medidas aprobados mediante una resolución.
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“Es un llamado a la ciudadanía para que eviten usar el transporte vehicular, busquen desincentivar esta práctica y tratemos de compartir más el carro, desde los empresarios promover los horarios escalonados, el teletrabajo, otras alternativas de transporte como el sistema integrado y la ciclocaminabilidad”, sostuvo María del Pilar Restrepo, subdirectora ambiental del Área Metropolitana.
De esta manera, expertos y el Área Metropolitana coinciden en la implementación de una cultura de movilidad sostenible, pero este llamado se enfrenta al acelerado sector de la construcción y la expansión urbanística que está teniendo la región, hecho que desencadena en episodios de contaminación.
