China se ha convertido en el segundo socio comercial de Colombia en el mundo y recibe el 10 % de las exportaciones que salen del país suramericano.
Colombia y China sellaron una decena de acuerdos en diferentes ámbitos que consolidan la mirada de socio estratégico que el país suramericano tiene hacia el gigante asiático, con el que buscará establecer un Tratado de Libre Comercio -TLC-.
«Quiero resaltar las buenas relaciones que hemos tenido con la China durante esos últimos 35 años de relaciones diplomáticas. China hoy es considerada un aliado estratégico en materia de cooperación», señaló este viernes 22 de mayo, el presidente Juan Manuel Santos en un discurso en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, tras reunirse con el primer ministro Li Keqiang, quien se encuentra en visita oficial en Bogotá.
Y las declaraciones no son en vano, ya que hoy ambos países sellaron diferentes acuerdos en materia de educación, comercio, infraestructuras o cultura, unos tratados que confirman la buena relación.
Más allá de esos convenios destaca el acuerdo alcanzado para comenzar a estudiar la posibilidad de negociar un Tratado de Libre Comercio – Tlc que multiplique las relaciones entre China y Colombia en este ámbito.
«Pero ahí hay un potencial enorme para incrementar ese comercio en ambas direcciones», apostilló el mandatario colombiano en referencia a los estudios para el lanzamiento del Tlc.
En 2014, según recordó Santos en su alocución, el comercio bilateral alcanzó los 17.000 millones de dólares, una cifra que es 15 veces superior a la registrada hace una década.
Según informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística Dane, Colombia tuvo en el primer trimestre del año un déficit comercial con China de 2.051 millones de dólares, la mitad de su saldo negativo total, de 4.047 millones.
Los habituales buenos propósitos de incrementar la relación cultural y educativa quedaron plasmados en papel con el compromiso chino de elevar las becas para universitarios colombianos de 20 a 200, una muestra de la buena sintonía existente entre las dos naciones.
Precisamente la educación es uno de los temas en los que el Gobierno colombiano ha puesto su foco con el objetivo de mejorar sus resultados académicos.
Por ello, según destacó Santos, China es un referente del que aprender por la buena marca obtenida en las pruebas Pisa.
Li destacó en su alocución que con estos convenios se acerca una nación como Colombia, «uno de los países latinoamericanos y caribeños más importantes en cuanto a civilización y cultura», con China, que «también tiene una civilización milenaria».
Con estos acuerdos se puede aumentar «el aprendizaje mutuo y asimilación de nuevas culturas» así como «consolidar la base popular de la amistad binacional», añadió el primer ministro.
En el acercamiento más puramente económico hecho entre ambos países también destacaron los acuerdos alcanzados en materia de infraestructura, un área en el que, según destacó Santos, China «tiene una gran experiencia».
Hoy el banco de desarrollo chino y la Financiera de Desarrollo Nacional de Colombia alcanzaron un principio de acuerdo para la construcción de dos obras de gran importancia estratégica.
Una de ellas es una carretera en la región de la Orinoquia, en el oriente de Colombia, lo que, unido a otro proyecto para mejorar la navegabilidad del río Meta, permitirá el desarrollo de esa zona, que tiene un gran potencial agropecuario.
Ambos mandatarios tomarán parte el sábado 23 de mayo, en un encuentro literario para conmemorar los 35 años transcurridos desde el establecimiento de relaciones bilaterales.
Tras el fin de su visita a Colombia, Li se dirigirá a Perú y Chile donde cerrará una gira suramericana que inició en Brasil.
