Entre otros, el Papa habló de Cambio Climático y aceptación por la población inmigrante.
Este jueves, el papa Francisco cerró su visita a Estados Unidos con una histórica asistencia al Congreso de ese país. Allí, el Sumo Pontífice habló de Cambio Climático, población inmigrante y, además, instó al Gobierno de aquel país a abolir la pena de muerte.
En relación con el tema de los inmigrantes, el Papa fue enfático al decir que “nosotros, pertenecientes a este continente, no nos asustamos de los extranjeros, porque muchos de nosotros hace tiempo fuimos extranjeros (…) No debemos dejarnos intimidar por los números, más bien mirar a las personas, sus rostros, escuchar sus historias mientras luchamos por asegurarles nuestra mejor respuesta a su situación. Una respuesta que siempre será humana, justa y fraterna”, así, Francisco recordó los flagelos a los que han sido sometidos los inmigrantes a lo largo de la historia.
Por su su parte, hablando de cambio climático, el Santo Padre afirmó que “Ahora es el momento de acciones y estrategias valientes”, e invitó al Gobierno de Estados Unidos a impulsar campañas que permitan combatir este problema de la humanidad que tiene sus raíces en la historia.
«Necesitamos un esfuerzo valioso y responsable para enfrentar los efectos más graves del deterioro ambiental (…) Estoy convencido de que podemos marcar la diferencia y no tengo alguna duda de que los Estados Unidos y este Congreso están llamados a tener un papel importante”, dijo.
De su lado y en el que fue tal vez el tema centrar de la intervención, el Papa abogó por los condenados a pena de muerte, pidió el respeto por la vida e instó a que sea abolida esta forma de castigo.
«Tratemos a los demás con la misma pasión y la compasión con la que queremos ser tratados (…) esta convicción me lleva a abogar por la abolición global de la pena de muerte. Todo ser humano está dotado de una dignidad inalienable, y la sociedad sólo puede beneficiarse de la rehabilitación de los condenados por crímenes», puntualizó el Pontífice.
Cerca de 50 personas siguieron el discurso del Papa desde afuera del capitolio. Así, Francisco cerró la visita en la capital de Estados Unidos para llegar hoy a Nueva York, en la gira más larga que ha realizado desde el comienzo de su pontificado a mediados de 2013 y que lo llevó a las ciudades de La Habana, Holguín y Santiago, en Cuba; y a Washington, D.C.
Allí, en uno de sus actos centrales, el Santo Padre realizó la ceremonia de canonización del beato Junípero Serra, saludó a los inmigrantes y pidió por trabajo con el fin de mitigar los impactos del cambio climático.
