La Onu recordó a los captores de la niña su obligación de dejarla en libertad de forma inmediata y de preservar su vida e integridad, así como garantizarle todos sus derechos.
La oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, condenó el secuestro de la hija del director de la Unidad Nacional de Protección -UNP-, Diego Mora, y exigió «su inmediata liberación sana y salva».
La ONU subrayó en un comunicado que el secuestro es una violación del derecho internacional de los derechos humanos, máxime cuando afecta el interés superior de una niña, en alusión a Daniela Mora, de once años de edad, raptada por desconocidos el pasado jueves 4 de junio, en Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela.
«La práctica deleznable del secuestro debe terminar de forma inmediata en Colombia, y sus consecuencias deben ser sancionadas de manera adecuada por las autoridades estatales, en aras de garantizar la paz y la reconciliación de todo el país», agregó la información.
La menor fue secuestrada después de salir de su colegio, un hecho que ha sido repudiado también por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, quien dijo que espera que la niña sea devuelta lo más pronto posible a su hogar.
Asimiso, la ONU expresó su solidaridad a Diego Mora y su familia, a los que ofreció sus buenos oficios para la resolución de este «lamentable hecho».
