El Mandatario dijo que esto lo exigirá el Gobierno de Colombia por las vías de la diplomacia y el diálogo, “que es como se entienden las naciones civilizadas”.
El presidente, Juan Manuel Santos, pidió este martes al Gobierno de Nicolás Maduro, que respete a los colombianos que están siendo deportados en las zonas de frontera y quienes, en la mayoría de los casos, han sido víctimas de atropellos de parte de la Guardia Venezolana.
“Al Gobierno de Venezuela le exigimos respeto por todos los colombianos: desde los más humildes hasta los más poderosos; desde los más cercanos a nuestro Gobierno, hasta los que nos critican ferozmente”, afirmó Santos al término de la reunión de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores.
El Mandatario, además, hizo énfasis en que todo ser humano merece respeto. “Aun si estuviera en un país sin todos los papeles legales, merece ser tratado con respeto y dignidad, y merece un debido proceso. Y eso es lo que vamos a exigir”, sostuvo.
“Allanar las viviendas, sacar a la fuerza a los habitantes, separar las familias, no dejarles sacar sus pocos bienes y marcar las casas para luego demolerlas, son procedimientos totalmente inaceptables. Lo que más nos preocupa, por supuesto, lo que es absolutamente intolerable, es el maltrato a nuestros compatriotas y la afectación a la población en la zona de frontera”, agregó.
De otro lado, el Presidente se refirió en relación con los avances del Gobierno para normalizar esta situación, y afirmó que este miércoles “nuestra canciller María Ángela Holguín, junto con los ministros del Interior, de Defensa y de Comercio, se reunirá con la Canciller venezolana para buscar soluciones conjuntas y para sentar también nuestra protesta por la forma en que han sido maltratados nuestros compatriotas”.
Así mismo, le dio instrucciones al Ministro de Minas y Energía, Tomás González, para que se garantice el suministro de combustible, ampliando los cupos de la gasolina subsidiada si fuera necesario. De igual forma, dio instrucciones a varios ministros del Gabinete para que se desplacen nuevamente a la frontera para seguir apoyando a la población afectada.
