La canciller María Ángela Holguín se reunió con varios representantes al Senado, entre ellos Álvaro Uribe Vélez, para discutir las excepciones preliminares de Colombia ante la CIJ.
La Ministra de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, se reunió con una bancada del Congreso de la República para discutir sobre el caso de Colombia y Nicaragua en la Corte de La Haya.
En el diálogo se discutieron las excepciones preliminares que Colombia plantea para argumentar que la Corte Internacional de Justicia, CIJ, no es competente para abordar la demanda hecha por Nicaragua.
A la reunión asistieron los senadores Mauricio Lizcano y José David Name, del Partido de la U; Álvaro Uribe, Alfredo Rangel y Tania Vega de Plazas, del Centro Democrático; Nidia Osorio, del Partido Conservador; Antonio Navarro, del Partido Verde; Jorge Robledo, del Polo Democrático Alternativo; Carlos Fernando Galán, de Cambio Radical, y Teresita García, de Opción Ciudadana. Además, la canciller Holguín asistió en compañía del co-agente de Colombia en los casos ante la CIJ, Manuel José Cepeda.
Luis Fernando Velasco, presidente del Senado, calificó como positivo el encuentro. “El Congreso considera que es muy prudente que todas las fuerzas políticas se puedan reunir con la señora Canciller, escuchar un poco cómo ha venido siendo la argumentación que ha planteado Colombia, las excepciones que ha presentado frente a las pretensiones que Nicaragua ha hecho. En mi caso en particular me parece que son unas excepciones bien logradas, muy bien trabajadas”, puntualizó.
Por su parte, María Ángela Holguín informó que el próximo 17 de marzo, es decir mañana, la CIJ decidirá si es competente para resolver la demanda impuesta por Nicaragua, mientras habló de la importancia de la reunión con la bancada del Congreso. “Creo que fue muy importante intercambiar estas ideas, fue realmente muy útil y muy enriquecedor”, aseguró.
Actualmente, Colombia atraviesa dos demandas interpuestas por Nicaragua, una sobre la supuesta violación de los espacios marítimos en el Mar Caribe, que según Nicaragua constituye una desobediencia al fallo del 2012 y otra por una plataforma continental, que se extendería más allá de 200 millas después del límite entre Colombia y Nicaragua. (Lea también Colombia se prepara para audiencias sobre diferendo limítrofe con Nicaragua).
