La humorista visitó Medellín para inaugurar un almacén de su cadena By La Gorda Fabiola, Tallas Grandes, en el centro comercial Santafé.
En entrevista con EL PALPITAR, la humorista conocida como la Gorda Fabiola confesó que pasó momentos angustiantes cuando su salud se vio quebrantada, pero también admitió la grata sorpresa que se llevó al recibir el apoyo de Colombia. La Gorda también habló de la película que lanzará pronto y de el almacén para mujeres de talla grande que acabó de abrir en Medellín.
-Hace poco el país se paralizó cuando tuvo inconvenientes de salud con su corazón, ¿cómo está ahora ?
“Hemos ido mejorando cada día de Dios, me he sentido muy bien. Fue muy duro, fueron momentos muy duros, un episodio muy lamentable en mi vida en el que yo sabía que me apagaba y me moría, eso fue muy duro con mi familia. Pero la oración de este país, que no sabía que me quería tanto, me ayudó a levantarme. Por eso en el día 14, después de agonizar, me levanté como el ave fénix y dije: me voy para mi casa, voy a salir adelante, voy a recuperarme. Soy un milagro”.
-¿Toda esta situación la ha llevado a cambiar hábitos de vida?
“Yo ya había entrado en la onda de hábitos saludables hace rato, esto me pasaba porque yo no escapaba a un mandato genético: papá y mamá con enfermedad coronaria, diabéticos. Lo que no esperaba era que me pasara tan temprano, tal vez por la vida tan agitada y tan estresante que llevaba, de aquí pa´allá, siga, corra, dele, duerma dos horas. Ahora esto me obligó a detenerme un poquito, disfruto de las cosas más elementales y básicas de la vida. Ahora todo lo estoy manejando suave, el estrés lo quiero lejos de mi vida, a kilómetros”.
-¿Qué puede adelantar de la película que lanzará próximamente?
“El primero de octubre estrenamos nuestra segunda película, que se llama Se Nos Armó la Gorda al Doble, Misión Las Vegas. En la primera parte Ricardo Quevedo hace un personaje de un detective en Estados Unidos y ayudó a Polilla a encontrar a su gorda que había sido secuestrada para un harén de gordas. Esta vez Polilla debe ayudar a su amigo Juancho (Ricardo Quevedo) a encontrar al asesino de su padre, que parece que está en la ciudad de Las Vegas, entonces hasta allá nos desplazamos todos y ocurren todas las aventuras. Proponemos más acción, más risa y más escenas divertidas”.
-¿Qué tal este momento para incursionar en el cine, cuando muchas películas colombianas figuran en festivales como el de Cannes?
“Eso es emocionante, yo no sé si nosotros algún día podremos tener la oportunidad de estar men Cannes, ojalá… por lo pronto estamos muy contentos porque la visión que tenemos, de divertir y hacer comedia, se está cumpliendo con una respuesta maravillosa”.
-Hace pocos días compañeros suyos del elenco de Sábados Felices tuvieron un accidente en carretera, ¿cómo fueron esos momentos?
“Se durmió el conductor que los llevaba y se salió de la carretera. Todos iban cansados, dormidos, en una carretera de Tame a Yopal. Se durmió el conductor y cayeron de cabeza al río. Cuando a mi me llaman y me dicen que se volcaron, no lo podía creer. Le marcaba a Patricia a su celular y no me contestaba, no quedé tranquila hasta que me la pasaron y cuando ella me dijo: ‘Fabito, estoy bien, se me dañó mi blower’, ahí sí dije ¡está bien! (entre risas)”.
-Usted hace muchas campañas sociales, ¿cuáles son las causas con las que más se identifica?
“Protejo animalitos porque los amo con el alma, doy la mano en la fundación Gorditos de Corazón que tiene sede en Medellín, y de donde me llamen y me toquen la fibra, ahí esto yo. Tu Cuentas, por ejemplo, es una campaña institucional, Presidencia de la República, Banca de las Oportunidades, Departamento Para la Prosperidad Social, que consiste en promover la inclusión, es ser incluyentes para que las personas de los sectores populares tengan abiertas las puertas de los bancos y mejorar la calidad de vida”.
-Otro proyecto es una nueva tienda de ropa para mujeres gordas en Medellín, ¿con qué tendencias abre este almacén, qué propone?
“Estamos proponiendo los flecos, la moda hippy chic, la moda tribal, la moda étnica. Es una tendencia, los pantalones con desgastes tal y como tu los ves en las tiendas de las flacas, así lo estamos proponiendo acá y es una colección con colores crudos. Proponemos colecciones de moda normales, de otoño, primavera y verano, en este momento estamos entrando al otoño y con él están las flores, los colores, los flecos, los encajes. Lo que se ve en cualquier almacén de flacas, acá lo estamos proponiendo”.
-¿Es una propuesta de vestuario para qué tipo de mujer, oficinista, joven, adulta…?
“Nosotros tratamos de vestir a la jovencita hasta la abuelita, desde la oficinista, que necesita vestirse con su sastre, su ropa clásica, le podemos dar la mano con el camisero, hasta la familia que quiere vestirse de acuerdo a su edad. Nosotros tratamos de darle un valor agregado a la ropa y son los accesorios, tenemos desde pashminas, fajas, sombreros, collares, que son un complemento y si no es gordita, sino fliaquita, acá también lo puede encontrar”.
-Gorda, ¿qué le acelera El Palpitar?
“Ver a mis hijos, ver a mi marido, ver a mi perro”.