Desde hace varios meses, sectores políticos de derecha estaban solicitando la libertad del exgobernador de Antioquia, quien presuntamente padece problemas de salud.
Por vencimiento de términos, la Corte Suprema de Justicia ordenó este miércoles 23 de noviembre la libertad inmediata del político antioqueño Luis Alfredo Ramos, quien permanecía recluido en Bogotá por sus presuntos nexos con grupos paramilitares.
«Me comunicaron telefónicamente que la Corte me dejaba en libertad, y revocaba la medida de aseguramiento de la que había sido objeto. Así que yo le di las gracias a los magistrados y les dije de mi alegría, pues es la posibilidad de reencontrarme con mi familia», dijo hace unos minutos el político.
Asimismo, tuvo la oportunidad de defenderse de los cargos de los que se le acusa. «Este ha sido un proceso en el que se ha detectado lo que son los falsos testigos en este país. Le agradezco a Dios por la fortaleza que he recibido, también a mis abogados», manifestó.
Inmediatamente se conoció la noticia de su libertad, sus copartidarios uribistas expresaron su contento y apoyo a Ramos. El senador Ernesto Macías indicó en Twitter que «con la libertad de Luis Alfredo Ramos, comienza el fin de otra terrible injusticia. Tres años y tres meses, con detención preventiva».
Los hechos
El entonces precandidato presidencial por el Centro Democrático fue arrestado luego de que la Corte Suprema de Justicia emitiera una orden de aseguramiento, en agosto de 2013.
De acuerdo con las pruebas acusatorias preliminares, Ramos se había reunido con el exparamilitar Iván Duque, alias ‘Ernesto Báez’, en una finca del municipio de Bello, en el Norte del Valle de Aburrá.
De acuerdo con las acusaciones de testigos, la reunión fue en 2005. No obstante, Ramos admitió que la reunión se dio en 2004, en el marco de las negociaciones del proceso de la Ley de Justicia y Paz, que permitió la desmovilización de las fuerzas de las Autodefensas Unidas de Colombia -Auc-.
Asimismo, se presumió de nexos de Ramos con el exjefe paramilitar alias ‘Don Berna’, gracias a declaraciones de los cabecillas criminales en el proceso contra Óscar Suárez Mira, exsenador de la República y hermano del actual alcalde de Bello, César Suárez Mira.
Aunque Ramos se declaró inocente y denunció que era víctima de falsos testigos y que nunca recibió dinero de paramilitares, permaneció recluido hasta el día de hoy en la Escuela de Caballería del Cantón Norte, en Bogotá.