En las últimas horas varios alcaldes de Antioquia firmaron acuerdo para prevenir casos similares.
La temporada decembrina es sinónimo de fiestas, regalos y unidad familiar y comunitaria, pero también es una temporada de alerta para las autoridades en salud debido a la tendencia de aumento en los casos de personas quemadas con pólvora.
En la capital antioqueña ya se han reportados dos casos de personas quemadas con estos explosivos. El primero se trató de un joven de 19 años de edad y residente de Belén, quien tras ser atendido fue dado de alta sin mayor gravedad; por su parte, el segundo quemado es de San Javier, un menor de 12 años quien permanece bajo observación médica. Ambas personas fueron trasladadas hasta el Hospital Universitario de San Vicente Fundación.
Con estos dos pacientes ya son tres las personas quemadas con pólvora en el departamento, habiéndose presentado el primer caso en el municipio de Envigado, donde una joven quedó con lesiones considerables luego de que desde un carro lanzaran un pila que cayó en la mesa donde comía.
De acuerdo con la gerente de Salud Pública de la Secretaría de Salud Seccional de Antioquia, Zulma del Campo, las regiones del departamento donde más se presentan quemados con pólvora son el Oriente y el Valle del Aburrá, lo que motivó a que varios de sus alcaldes firmaran un acuerdo para prevenir la problemática.
Entre el 1 y el 31 de diciembre 2013, se presentaron 275 casos de personas quemadas, entre ellas 112 eran menores de edad; en el mismo periodo de 2014 las víctimas fueron 248, siendo 100 menores de 18 años; además, en el mes de noviembre se presentaron 15 pacientes más por el mismo problema.
Y aunque el departamento ha disminuido en este flagelo gradualmente con respecto a las cifras de años anteriores, las autoridades siguen atentas para evitar que más personas, en especial niños, salgan afectados por la pólvora que se lanza.
