Al parecer, uno de sus aliados estratégicos sería alias «Otoniel», máximo cabecilla del «Clán Úsuga».
Un hombre de 41 años de edad y conocido con el alias de «Gomelo», fue capturado por las autoridades en el barrio Laureles y es sindicado de ser el presunto cabecilla de la banda delincuencial «Los Chatas», organización que tendría nexos, entre otros, con el «Clan Úsuga».
De acuerdo con información entregada por las autoridades, el sujeto habría empezado a delinquir hace más de 20 años al lado de su hermano «Merchán», quien fuera asesinado en 2001. Desde entonces, él habría seguido su accionar delictivos pero siempre con un bajo perfil que le permitió esquivar a la justicia durante todos estos años.
Se presume que dada la cercanía que este hombre alcanzó a tener con la familia Castaño Gil y sus antecedentes como paramilitar, se permitió tener relaciones estrechas con los máximos cabecillas de la denominada «Oficina» de Envigado, los ya capturados «Sebastián», «Valenciano» y «Frank».
Su papel en las organizaciones criminales, estaba basado principalmente en el manejo de finanzas y lavado de dinero que se realizaba a través de compraventas ubicadas en Medellín, Chocó, Valle del Cauca, Panamá y Ecuador.
El Mayor General José Ángel Mendoza Guzmán, comandante de Policía Región número seis, señaló que su modalidad para no ser detectado por las autoridades, consistía en trasladarse a los sitios en donde se había citado con otros cabecillas movilizándose en carros diferentes durante todo el trayecto, mismos que eran abordados en centros comerciales para pasar inadvertido.
Además, alias «Gomelo» estaría detrás de las extorsiones hechas a constructoras que, además de tener que pagar altas sumas de dinero, se veían obligadas a contratar miembros de las estructuras criminales y hasta facilitar acceso a los apartamentos de forma legal.
El capturado fue puesto a disposición de la autoridad competente.