La menor estuvo internada en un hospital por nueve días.
Conmovida se encuentra la comunidad del barrio Santa Cruz, al nororiente de Medellín, luego de enterarse de la muerte de una niña de dos años a quien le cayó una fritadora con aceite caliente, hecho que le produjo quemaduras en todo su cuerpo. El incidente se registró el 20 de septiembre en la carrera 48A con calle 108 A.
Leider López, padre de la menor, contó que en ese momento había llegado del centro de la ciudad donde se encontraba realizando unas compras para la celebración del Día del Amor y la Amistad, otra persona entró a la vivienda y dejó la puerta abierta, por lo que la niña aprovechó y salió a jugar con otros niños.
Contiguo a la vivienda, se ubicaba un puesto de comidas fritas, la señora quien atendía en el sitio estaba en compañía de su hija y su nieto menor de edad quien, al parecer, estaba jugando en los alrededores. Accientalmente, el niño habría halado el cable que conectaba la fritadora y en ese mismo momento la niña que pasaba por el lugar recibió todo el aceite caliente.
Los gritos de los vecinos alertaron a la madre de la menor quien de inmediato salió y le quitó la camisa, el padre paró un taxi y se trasladó con ella hasta el Hospital Universitario de San Vicente Fundación, donde permaneció internada nueve días antes de fallecer el martes 29 de septiembre.
De acuerdo con el reporte de las autoridades y versiones entregadas por sus familiares, la niña sufrió quemaduras en todo el cuerpo, un 25% de segundo grado y el resto de tercer grado.
«La señora es tía de la niña, ella está muy mal y yo no le hecho la culpa de nada, eso es un accidente que sucede en cualquier momento», comentó el padre de la menor, quien además recordó lo vivaz y juguetona que era su hija.
