El Papa Francisco beatificó a su predecesor Pablo VI en una ceremonia en la Plaza de San Pedro.
El Papa Francisco beatificó al Papa Pablo VI y destacó la labor que realizó el sumo pontífice, por la evangelización y el papel que desarrolló durante el Concilio Vaticano II y los años siguientes, durante el tiempo que estuvo al frente de la Iglesia Católica; entre 1897 y 1978.
“Luego de haber tenido el parecer de la Congregación de las Causas de los Santos, con nuestra autoridad apostólica, concedemos que el venerable siervo de Dios Pablo VI, Papa, de ahora en adelante sea llamado beato y que se pueda celebrar su fiesta, en los lugares y de acuerdo a las reglas establecidas por el derecho, cada año el 26 de septiembre. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”, dijo el Papa Francisco, al declarar la santificación.
Al beatificar a cualquier santo, la iglesia presenta una reliquia del mismo, por esto se presentó una camiseta con su sangre, consecuencia del atentado que sufrió el 27 de noviembre de 1970 en el Aeropuerto Internacional de Manila, en Filipinas.
A la ceremonia también asistió el Papa emérito Benedicto XVI, quien dijo que su nombramiento como cardenal lo había hecho el Papa Pablo VI.
En la eucaristía de beatificación también se clausuró el Sínodo extraordinario de la familia, celebrado por estos días en el Vaticano.
