El presidente venezolano mostró un audio en un evento gubernamental en el que se utilizaba la música de «Despacito» para hacer apología a la Asamblea Constituyente.
Los cantantes puertorriqueños Luis Fonsi y Daddy Yankee manifestaron su inconformismo por el audio que reprodujo en un evento público el presidente Nicolás Maduro, con el sonido y parte de la letra de «Despacito», el éxito interpretado por ambos que ya suma más de 2.700 millones de reproducciones en Youtube.
A través de sus redes sociales, Daddy Yankee expresó su descontento hacia el uso indebido de la canción, con el fin de hacer propaganda política. «Con ese nefasto plan de mercadeo, usted solo continuará poniendo en evidencia su ideal fascista, que ha matado a cientos de héroes y [causado] más de 2.000 heridos», señaló el artista.
Por su parte, en su cuenta de Instagram, Luis Fonsi criticó con severidad el accionar del oficialismo frente a su canción. «Mi música es para todos aquellos que quieran escucharla y disfrutarla, no para usarla como propaganda que intenta manipular la voluntad de un pueblo que está pidiendo a gritos su libertad y un mejor futuro», dijo en la red social.
Ambos concuerdan en una cosa: no están de acuerdo con el gobierno de Maduro y, por ende, se oponen al uso de sus canciones para algún tipo de fin político. Además, de acuerdo con la legislación, es posible emprender acciones legales en contra del uso inapropiado de la composición.
Cabe señalar que el 30 de julio, Venezuela está convocada a elegir a los 500 miembros de la Asamblea Nacional Constituyente, quienes tendrán el rol y la tarea de redactar una nueva Constitución, la cual daría poderes al Gobierno de turno para rediseñar el panorama nacional de fondo.
Las olas de protestas en Venezuela, de acuerdo con las fuentes oficiales, han dejado por lo menos cien muertos y centenares de heridos, además de por lo menos mil personas detenidas.
