«Ningún soñador es demasiado pequeño y ningún sueño es demasiado grande»: Robinson Vargas.
A través de una sencilla iniciativa social que demuestra que los pequeños cambios también cuentan, catorce niños de la vereda La Granja del municipio de Cocorná, cumplirán su sueño de ir a una sala de cine en la ciudad de Medellín.
Cocorná no escapa a la realidad de la gran parte del país. El conflicto armado interno ha hecho mella en la vida de los habitantes del municipio, tanto en el casco urbano como en la ruralidad.
Once niños estudiantes de la escuela de la vereda La Granja son víctimas, precisamente, de la violencia en una de sus más crueles modalidades: el desplazamiento forzado.
Por ese motivo, Robinson Vargas, docente de dicha institución educativa, decidió darles un regalo a estos niños quienes, debido a la violencia, han tenido que resignar muchos de sus anhelos.
Al preguntarles a los niños cuáles eran los sueños que tenían y deseaban cumplir, Robinson encontró entre ellos uno «muy simple y sincero: conocer una sala de cine y ponerse unas gafas 3D», describió Vargas.
Desde ese momento inició los preparativos para hacer realidad ese anhelo. Contactó a Gabriel Jaime Mazo, un amigo suyo en Medellín, quien empezó a buscar personas que desearan apoyar la iniciativa.
«En el proceso nos encontramos con personas caritativas y de buen corazón», mencionó Mazo, quien también apuntó que, además de la función de cine, también se llevará a los niños a Divercity, un espacio educativo donde, según él, «verán cómo en un futuro pueden desempeñarse en la sociedad.»
Los niños llegarán a la ciudad el próximo miércoles cinco de agosto, y podrán así, a través de una iniciativa sencilla pero hecha con amor, cumplir su sueño.
El Palpitar también hace parte de este sueño y como medio de comunicación, estaremos relatando las historias que involucran a este grupo de pequeños soñadores. Seguimos atentos a cada uno de sus pasos camino de lograr este sueño.
Nuestra misión como medio, será siempre estar del lado de las comunidades y aportar para el progreso de las mismas. En El Palpitar y al lado de las comunidades #PalpitamosJuntos
